El cantante Julio Iglesias, durante un concierto en Mónaco en 2016.
Julio Iglesias agrandó su leyenda este sábado al recibir un Grammy honorífico como reconocimiento a su exitosa carrera en una gala organizada en Los Ángeles (EE UU) por la Academia de la Grabación.
El cantante español, uno de los artistas latinos más exitosos e influyentes de la historia, no pudo asistir al acto, pero envió un vídeo para agradecer el premio Lifetime Achievement Award, una distinción que rinde homenaje a los intérpretes que han hecho contribuciones de gran importancia en la música.
«Me encantaría estar ahí. Muchas gracias a todos los miembros de la Academia de la Grabación por este hermoso regalo», dijo Iglesias en su mensaje.
«No nací para ser músico. Nací para jugar al fútbol (…). Y, de repente, tuve un accidente terrible y casi quedé parapléjico. Entonces me dieron una guitarra y esa guitarra cambió mi vida por completo», afirmó en relación al comienzo de su trayectoria artística en la década de los años 60.
«Para esa gente que ha tenido ese tipo de situaciones trágicas en la vida, no os rindáis jamás: la vida es siempre una oportunidad«, aseguró.
El tenor puertorriqueño Fernando Varela fue el encargado de representar este sábado la obra de Iglesias sobre el escenario interpretando con gran emoción las canciones Bésame mucho y Caruso.
En una entrevista el pasado diciembre, cuando se anunció que recibiría este reconocimiento tan especial, el cantante español más universal dijo que sigue siendo un «guerrillero de la vida de principio a fin» y que este galardón supone un «gran estímulo» para su carrera.
«Es lo último que me esperaba. Es un premio que me honra muchísimo y sí lo quiero recibir, sin falsas modestias, porque es un recuerdo imborrable en mi vida», destacó.
Iglesias fue uno de los elegidos este año por la Academia de la Grabación para sus galardones honoríficos, que este sábado también reconocieron a otros emblemáticos artistas como Black Sabbath, George Clinton y Parliament-Funkadelic, Billy Eckstine, Donny Hathaway, Sam & Dave y Dionne Warwick.
Bajo el título ‘Homenaje de los Grammy a las leyendas musicales’, el evento celebrado este sábado por la noche no ha sido un acto especialmente mediático o publicitado por la Academia de la Grabación, puesto que es, técnicamente, una grabación televisiva, ya que la cadena PBS organizó y registró al detalle la velada para emitirla dentro de unos meses en un programa especial.
La ceremonia, no obstante, tuvo lugar en uno de los recintos más conocidos y glamurosos de Los Ángeles: el Dolby Theatre, el teatro en el que cada año se celebran los Oscar.
No muy lejos del Dolby Theatre se encuentra la estrella que Julio Iglesias tiene con su nombre en el Paseo de la Fama de Los Ángeles, un ejemplo brillante más de los muchos que adornan el espléndido currículum de este mito de la canción hispana.
Más de 350 millones de discos vendidos en catorce idiomas durante medio siglo de carrera reflejan el fenómeno mundial de un cantante que en 2018 celebró su 75 cumpleaños.
Iglesias es el tercer español en recibir el Grammy honorífico a toda una carrera después del guitarrista Andrés Segovia y el violonchelista Pau Casals.
Además, Iglesias se ha unido a una selecta lista de artistas latinos que obtuvieron el Lifetime Achievement Award, entre los que figuran Celia Cruz, Antônio Carlos Jobim o Armando Manzanero.
Todos estos nombres figuran en el palmarés de un premio muy exclusivo de la Academia de la Grabación que casi puede resumir la historia de la música en el siglo XX, ya que entre sus homenajeados aparecen The Beatles, Bob Dylan, Elvis Presley, Jimi Hendrix, Aretha Franklin, Nina Simone, Miles Davis, John Coltrane, Billie Holiday, Louis Armstrong, Barbra Streisand, Frank Sinatra o María Callas.